Bruselas quiere microcoches, no tus excusas

Bruselas quiere microcoches, no tus excusas

Y mientras unos lloran por sus motores, otros aprenden a construir barcos… o a fabricar baterías.

La realidad, esa cosa tan molesta que ignora por completo las opiniones de los comités de dirección, ha vuelto a presentar sus facturas. La primera es climática, de 43.000 millones de euros solo para empezar. La segunda es geopolítica, una que los fabricantes chinos están esquivando con la elegancia de un samurái mientras los europeos todavía debaten el color del tatami. Y la tercera es digital, donde el aparente regalo de la información gratuita revela su verdadero coste.

Bienvenidos a la autopsia del pasado. Sírvanse un café bien cargado, porque la dosis de realidad de hoy es doble y sin azúcar. Lo van a necesitar.

1. Objetivo 2035: La UE prefiere la lógica de los microcoches a las lágrimas de los gigantes 🇪🇺💨

¿Por qué importa?: Porque la Unión Europea ha decidido no ceder ante la pataleta de los dinosaurios industriales y, de paso, ha abierto la puerta a los únicos vehículos eléctricos que tienen un sentido lógico en el caos de una ciudad: los pequeños y asequibles.

Coches eléctricos pequeños como el BYD Dolphin

El objetivo de cero emisiones en 2035 se mantiene firme. Durante la cumbre automovilística de septiembre, la presidenta de la Comisión Europea lo reafirmó, ignorando la presión de altos ejecutivos como Ola Källenius de Mercedes-Benz o Hildegard Müller de la ACEA (la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles, para los que viven en una cueva). Su intento de flexibilizar la norma es el equivalente a pedirle a un meteorito que, por favor, caiga un poco más despacio para no estropear el césped.

La Comisión considera la meta “alcanzable”, pero claro, eso exige que todos los actores dejen de mirarse el ombligo y se pongan a trabajar. La novedad más interesante, filtrada por Der Spiegel, es un borrador interno que, por una vez, huele a sentido común. Propone tres ejes: una iniciativa para la producción europea de celdas de batería, apoyo al desarrollo de software de automoción y, lo más importante, la creación de incentivos para fabricar vehículos eléctricos más pequeños y asequibles.

Este concepto abre la puerta a un marco regulatorio específico para microcoches eléctricos. Hablamos de vehículos urbanos y ligeros que podrían recibir créditos de CO₂ adicionales, haciendo su producción más atractiva. Mientras tanto, la decisión sobre posibles excepciones para los híbridos enchufables, esos unicornios que funcionan con gasolina el 90% del tiempo, se retrasa hasta la primavera de 2026. La solución al objetivo de cero emisiones no son más parches tecnológicos, sino un empujón decidido a una movilidad eléctrica racional. ¿Veremos al fin coches eléctricos que no necesiten una hipoteca para ser comprados?

2. Clima: La factura de 43.000 millones por ignorar a la ciencia llega puntual ☀️💸

¿Por qué importa?: Porque la frase “esto del cambio climático no era para tanto” acaba de ser cuantificada por el Banco Central Europeo en 43.000 millones de euros. Solo este año. Disfruten de las consecuencias de lo que han negado.

Los posibles efectos futuros del cambio climático global incluyen incendios forestales más frecuentes, períodos más prolongados de sequía en algunas regiones y un aumento en la duración e intensidad de las tormentas tropicales.

El impacto de los extremos climáticos del verano de 2025 ya no es una teoría, sino un número en un balance de pérdidas. Un estudio conjunto de la Universidad de Mannheim y el BCE ha puesto cifras al desastre: las olas de calor, sequías e inundaciones que asolaron Europa de junio a agosto costaron 43.000 millones de euros a la economía de la UE. Y esto es solo el aperitivo; la proyección para 2029 asciende a 126.000 millones.

Las regiones mediterráneas, esas postales idílicas que venden sol y playa, son las que más pagan. España, Italia, Portugal, Grecia y el sur de Francia sufrieron la mayor parte del golpe. Italia, por ejemplo, registra pérdidas de 11,9 M€ en 2025 que se dispararán a 34,2 M€ en 2029. En el periodo completo de 2025-2029, se estima que España, Francia e Italia soportarán entre 34.000 y 35.000 millones cada una. Es el precio inevitable de haber usado la atmósfera como un vertedero durante un siglo.

Aferrarse al motor de combustión por su ‘sonido’ es como elogiar a un caballo por lo mal que huele su estiércol justo antes de que te adelante un coche.

Los propios investigadores advierten que sus datos son conservadores. No han incluido los costes de incendios, granizadas ni “eventos compuestos”. La única solución real y pragmática al impacto de los extremos climáticos no es rezar, sino la adaptación: invertir masivamente en protección contra el calor y en una gestión del agua inteligente. O eso, o empezamos a construir ciudades con aire acondicionado gigante. ¿Adivinan qué opción es menos estúpida?

🎁 Error Fósil de Ayer

"No hay ninguna posibilidad de que el iPhone vaya a hacerse con una cuota de mercado significativa. Ninguna."

Steve Ballmer, CEO de Microsoft, 2007.

Una cita perfecta para recordar a los ejecutivos del motor que siguen pensando que el coche eléctrico es una moda pasajera. El futuro no suele pedir permiso.

3. La estrategia del Caballo de Troya de Xpeng: ‘Hecho en Europa’ con truco chino 🇨🇳🇦🇹

¿Por qué importa?: Porque mientras la industria europea debate cómo protegerse, los fabricantes chinos ya están dentro, ensamblando coches en el corazón de Austria para saltarse los impuestos que, en teoría, debían frenarlos. Es un jaque mate logístico.

La imposición de aranceles a los coches chinos por parte de la UE tenía una intención clara: proteger una industria local lenta y anquilosada. La respuesta del fabricante Xpeng ha sido tan brillante como brutal: en lugar de enfrentarse al muro, lo ha rodeado. Ha iniciado la producción local de sus SUV G6 y G9 en la planta de Magna Steyr en Graz, Austria, una de las catedrales de la fabricación por contrato.

El método es el SKD (Semi-Knocked Down), que en lenguaje de granjero significa “te mando el tractor en fascículos para que le pongas las últimas cuatro tuercas tú”. Envían kits de vehículos parcialmente desmontados desde China y el ensamblaje final se realiza en Europa. Con esta simple maniobra, el coche se considera “europeo” y esquiva el recargo adicional del 21,3% que la UE aplica a los eléctricos importados de China, además del 10% de arancel base.

XPENG ya se puede conocer en Ppe. de Vergara, 37

Esto no es una amenaza lejana; es una realidad palpable. Los primeros vehículos producidos localmente salieron de la línea en el tercer trimestre de 2025. Es una jugada maestra de pragmatismo: Xpeng evita construir una fábrica desde cero y Magna aprovecha una capacidad ociosa tras perder contratos con Jaguar y Fisker. La verdadera solución a los aranceles a los coches chinos no era construir muros burocráticos más altos, sino tener fábricas más inteligentes y flexibles. ¿Cuánto tardarán los demás fabricantes asiáticos en copiar esta estrategia ganadora?

4. Google vs. Editores: La IA que canibaliza a sus creadores 🤖⚖️

¿Por qué importa?: Porque el gigante tecnológico que te proporciona “respuestas” instantáneas ahora lo hace utilizando como materia prima, y sin permiso, el trabajo de quienes crean esas respuestas. Y los editores, finalmente, se han hartado.

La inteligencia artificial de Google, bautizada con el nombre corporativo de “AI Overviews”, es esa caja con un resumen automático que aparece en la parte superior de muchas búsquedas. Penske Media, el coloso propietario de cabeceras como Rolling Stone, Billboard y Variety, ha presentado una demanda ante un tribunal federal acusando a Google de usar sus contenidos sin autorización ni compensación para alimentar esas respuestas.

La inteligencia artificial Gemini 2.0 de Google ya está disponible para todos

La querella es demoledora. Sostiene que Google obliga a los editores a permitir el uso de sus artículos para la IA como condición indispensable para aparecer en los resultados de búsqueda. Es una extorsión digital: o me dejas canibalizar tu trabajo, o te hago invisible. Penske alega que esta práctica provocó una caída de más de un tercio en sus ingresos por afiliación a finales de 2024, ya que los usuarios obtienen la respuesta sin necesidad de hacer clic en el enlace original.

Google, que controla cerca del 90% del mercado de búsquedas en Estados Unidos, impone unas condiciones que otros desarrolladores de IA, como OpenAI, al menos negocian y pagan a través de acuerdos de licencia. La defensa de la compañía es la misma arrogancia de siempre: afirma que las AI Overviews “mejoran la experiencia de búsqueda”. La solución a la inteligencia artificial de Google que devora el ecosistema de contenidos que la alimenta parece que, por ahora, pasa por los tribunales. ¿Es este el principio del fin del espejismo del contenido “gratis”?

LA DESPEDIDA

El resumen del día es insultantemente sencillo: la realidad, una vez más, ha adelantado por la derecha a todos los que conducen mirando por el retrovisor. Bruselas confirma que el futuro del transporte no ruge, sino que zumba silenciosamente. La naturaleza nos pasa una factura con tantos ceros que solo se puede pagar con ingeniería y adaptación, no con discursos políticos. Los fabricantes chinos, por su parte, demuestran que la burocracia es un obstáculo solo para el que no tiene imaginación. Y Google nos recuerda que la información nunca fue gratis, simplemente tenía un modelo de negocio que ahora ha mutado en un parásito digital.

Creer que se puede frenar la transición a lo eléctrico es como intentar detener la marea con un tenedor.

He pasado décadas viendo venir esto mientras me llamaban loco. Hoy, la evidencia es tan abrumadora que hasta los más ciegos empiezan a tropezar con ella. Ya no se trata de si este cambio va a ocurrir, sino de si serás el que construye el muro de contención o el que se ahoga en su propia y ruidosa nostalgia.

Ahora la pregunta es vuestra, y es muy simple: ¿estáis en el bando de los que ven el tsunami y compran una tabla de surf, o de los que se quejan amargamente de que el agua está mojada?